
Un nuevo incidente, que podría haber concluido en un conflicto armado, ha enturbiado, un poco más, las relaciones diplomáticas entre Atenas y Ankara, en un conflicto en el cual la UE ha amenazado a Turquía con sanciones si no cesa en sus provocaciones
Las aguas discurren turbulentas en el mediterráneo, sobre todo en su parte oriental, donde se están produciendo reiterados incidentes entre barcos de las armadas griegas y turcas, habiéndose localizado el último amago de enfrentamiento en las proximidades de Castelórizo.
Mediación alemana

El último incidente se ha producido debido a que armadores turcos han destacado un barco de prospección de hidrocarburos a unas aguas a las que nadie reconoce la territorialidad turca.
Lo único que evitó un incidente bélico entre las armadas griega y turca fue una llamada de la canciller alemana Ángela Merkel a los máximos mandatarios griego – Kyriakos Mitsotakis – y turco, Recep Tayyip Erdoğan.
Los turcos habían preparado todo para inflamar las aguas del mediterráneo coincidiendo con la visita oficial que el ministro de exteriores alemán, Heiko Maas realizaba a Atenas, seguramente para poder volver a tener una «línea directa» con la canciller alemana.
Desde la diplomacia turca se había advertido a Atenas que el buque Oruç Reis iba a realizar estudios sismográficos hasta el 2 de agosto en las aguas que median entre Creta y Chipre, realizando sus prospecciones en las aguas de las islas de Rodas, Cárpatos y Castelórizo.
Atenas considera que esas prospecciones se están llevando a cabo en sus aguas territoriales por lo que ha puesto en alerta a su armada al sur y sudeste del Mar Egeo, y tal como ha comunicado el Ministerio de Defensa heleno, «responder a cualquier actividad».
Según el Derecho del Mar de la ONU, documento que Turquía nunca ha rubricado, reconoce que las aguas donde se están produciendo las prospecciones son aguas territoriales griegas, reconocidas así por la comunidad internacional.
La Unión Europea se suma

La UE ha dado un apoyo sin ambages a Grecia y ello por dos razones fundamentales: primero porque es un país que por pleno derecho pertenece a la Unión Europea, y por otro debido a que, con la Convención del Mar de la ONU, se trata de aguas territoriales griegas.
Aprovechando que se encontraba en visita oficial en Atenas, el titular de la cartera de exteriores alemán Heiko Maas ha advertido que cualquier negociación con Turquía para su adhesión a la UE pasan por cesar en ese tipo de «provocaciones».
Aprovechando la comparecencia pública, su homólogo griego, Nikos Dendias, ha recordado a Turquía que su mayor socio comercial es la Unión Europea, y que cualquier sanción europea heriría de muerte a la economía turca.
Turquía goza de una exención de aranceles en su comercio con los países de la Unión Europea, y en parte ese trato de favor le ha permitido mantener a flote su industria, y desde el desencadenamiento de la pandemia del covid-19 hacer pingües negocios vendiendo mascarillas.
Medios alemanes han publicado informaciones que asegurarían que la llamada de Merkel a los mandatarios griego y turco evitó un incidente bélico que habría podido precipitar una guerra.
Mientras Ángela Merkel hablaban con Recep Tayyip Erdoğan, 18 barcos de guerra turcos se dirigían a la zona y dos cazabombarderos turcos realizaban vuelo rasante sobre el islote de Strongyli.
Quejas de la diplomacia turca

A pesar de que sus reivindicaciones nunca han sido asumidas por la comunidad internacional, Turquía siempre ha querido delimitar su zona económica exclusiva a partir de su plataforma continental.
Sin embargo, la ONU reconoce, por la existencia de islas de soberanía griega, una zona económica exclusiva al país heleno que prácticamente llegan, en algunos lugares, hasta la costa turca.
Esa es una de las principales quejas de la diplomacia otomana, ya que, por una de las islas, de soberanía griega, que se encuentran a dos kilómetros de la costa turca y a 580 kilómetros del litoral heleno, se derivan 40.000 km2 de aguas territoriales griegas.
Enseñando la patita

Nadie duda que las prospecciones sismográficas que están realizando son el preámbulo a prospecciones para encontrar yacimientos submarinos de gas o petróleo, que se llevan haciendo desde finales del 2019.
Realmente estas prospecciones son anecdóticas, ya que forman parte de una estrategia a largo plazo, siendo una de las últimas escenificaciones la conversión de la Catedral de Santa Sofía en una mezquita.
La consagración de Santa Sofía se ha realizado en una fecha tan significativa como el aniversario de la firma del Tratado de Lausanne, por el cual todas las islas en manos de la Sublime Puerta pasaban a manos griegas.
Además, Turquía no es un estafermo sometido a las sanciones de la UE, ya que tiene una enorme capacidad de presión ante la Unión Europea, dado que es la puerta de la inmigración ilegal hacia Europa.
De hecho, y como medida de presión en muchas negociaciones con la UE, las autoridades turcas han «mirado hacia otro lado» permitiendo que cientos de refugiados inundaran los países europeos.
Un gasoducto que tensa más las relaciones

El ducto se llama EastMed, y el pasado 19 de julio Israel, Grecia y República de Chipre han ratificado un acuerdo para su construcción y que llevará gas natural desde el Mediterráneo oriental a la Unión Europea.
Se trata de una obra faraónica, que va a tener un coste de 6.000 millones de euros y que discurrirá por 2.000 kilómetros, aunque para que se pueda construir se necesita el permiso de Italia, ya que una parte del EastMed discurre por territorio italiano.
Desde la parte hebrea, el ministro de Energía, Yuval Steinitz, ha valorado el hecho que con EastMed su país se convierte en exportador de energía, algo que hará fluir las divisas hacia Israel y llevará el bienestar a su población.
En la actualidad EastMed se encuentra en fase de proyección, y se están realizando los planos, tanto en la parte terrestre como en la marítima, y se espera que la construcción este terminada en el 2025.
Fuente – LA VANGUARDIA / Grecia en Wikipedia / Turquía en Wikipedia / Internacional en LA VANGUARDIA / Chipre en Wikipedia
Imagen – Official U.S. Navy Page / U.S. Departament of State / John A. Watson / Nandu Chitnis / Jason Woodhead