
Con los datos que ha obtenido el espionaje norteamericano, la invasión terrestre de Ucrania por parte de Rusia se podría producir en los primeros días de febrero, y las tropas rusas estarían esperando a las heladas de febrero para hacer avanzar a sus tropas hacia Kiev, la capital ucrania
Y la víctima puede ser Ucrania a manos de las ambiciones expansionistas de Vladimír Putin, siempre según la actual administración norteamericana de Joe Biden.
Y el ataque ruso puede tener ya una fecha prefijada, siempre según la inteligencia norteamericana, que se situaría en los primeros días del próximo mes de febrero.
A pesar de ellos, el ministro de exteriores ruso, Sergei Lavrov, «templa gaitas» y afirma que sí la decisión depende de su país, esa invasión nunca se producirá.
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Es a lo que se ha aprestado la administración presidencial de Joe Biden, que ha comunicado la noticia – una invasión rusa para los primeros días de febrero – al primer ministro ucranio, Volodímir Zelenski.
Pero la Casa Blanca también ha lanzado la advertencia en la cuenta oficial de Twitter; la encargada de anunciar la noticia ha sido Emily Horne, que a la sazón es la portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de Estados Unidos.
Sin embargo, desde el 1600 de la Avenida Pensilvania se ha negado que Joe Biden hubiese comunicado la fecha de la invasión en una reunión con el primer ministro ucranio, noticia de la que se ha hecho eco la CNN.
Según la CNN, Rusia estaría esperando a que el territorio fronterizo entre Rusia y Ucrania, donde hay concentrando un contingente de 100.000 soldados rusos, se congele para que el ejército ruso pueda operar.
Inclusive las informaciones de la cadena de televisión norteamericana añaden que la intención de ejército ruso sería tomar la capital ucrania, Kiev, e inclusive, como medida de castigo, saqueen la ciudad.
Rusia lo niega

Ante las informaciones que anuncian que el ejército ruso lanzaría una operación militar contra Ucrania en los primeros días de febrero, el ministerio de exteriores ruso lo ha negado.
Ha sido su cabeza visible, el ministro de exteriores Sergei Lavrov, quien ha indicado qué, si de Rusia depende dicha invasión, esta nunca se llegará a producir.
De las declaraciones del ministro de exteriores ruso se han hecho eco tanto los medios de comunicación rusos como los ucranios.
Sin embargo, Rusia, a modo de coletilla, también ha indicado a los medios que no se quedarán de brazos cruzados mientras a 500 kilómetros de su capital se están instalando armas de alto poder destructivo enviadas por Estados Unidos y Reino Unido.
Todas las potencias, y Rusia lo es, suele rodearse de estados tapón donde coloca a regímenes títeres que permitan tener un colchón territorial en caso de que se produzca un ataque contra su territorio.
Desmentido de la Casa Blanca

Sin embargo, Emily Horne ha tenido que salir a desmentir algunas informaciones que han aparecido en diversos medios sobre lo que Joe Biden ha dicho o no ha dicho.
Lo primero que ha matizado es que Biden solo informó a Zelenski de que se podría, en condicional, darse una invasión de su país por tropas rusas.
Lo que sí dejó, según Horne, meridianamente claro Joe Biden es que Estados Unidos y sus aliados responderán ante la posible invasión rusa brindando todo su apoyo a Ucrania, su gobierno y su población.
Inclusive Biden fue más allá y anunció a Zelenski que Estados Unidos podría dar ayuda macroeconómica adicional a Kiev, para poder hacer frente a la intimidación rusa.
Evacuación del personal no esencial

Lo que no puede negar Estados Unidos es que el personal no esencial y los familiares del personal diplomático de su embajada en Kiev están siendo evacuados.
A pesar de ello, desde la Casa Blanca se quiere dejar claro que su embajada y consulado en la capital ucrania siguen plenamente operativos, ya que los únicos evacuados han sido el personal no esencial.
Al mismo tiempo, el consulado norteamericano en Kiev ha aconsejado a los ciudadanos norteamericanos a que no viajen al país, y que los norteamericanos que se encuentren en estos momentos en territorio ucranio vuelvan a Estados Unidos en cuento puedan.
Un diálogo de sordos

Es lo que se ha instalado entre Rusia y Estados Unidos, y el ministerio de exteriores ruso considera como confuso el discurso que está manteniendo el país del que es presidente Joe Biden.
Uno de los principales caballos de batalla para Rusia es lograr un compromiso de Estados Unidos de que no se instalarán misiles de corto y medio alcance en territorio europeo, lo que podría ser una amenaza de primer orden para Rusia.
Otro de los compromisos que Rusia quiere arrancar a Estados Unidos, y a lo que ya ha contestado que no, es que ninguno de los países que formaban parte de la extinta URSS, será invitado a ser miembro de la OTAN.
En especial, Rusia tiene interés en que tanto Ucrania como Georgia no caigan dentro de la órbita occidental, ya que ambos países tienen cientos de kilómetros de frontera con el país que gobierna Vladimír Putin.
Agradecimiento ucranio

Desde el gobierno ucranio se ha agradecido efusivamente a Estados Unidos el apoyo incondicional que está teniendo de lo que hoy por hoy, nadie sabe que sucederá mañana, es la primera potencia mundial.
Volodimír Zelenski también ha agradecido que hasta en una situación de posible guerra inminente, Estados Unidos mantiene abiertos tanto su embajada como su consulado en Kiev, la capital ucrania.
Una calma tensa

A pesar del apaciguamiento ruso, que afirma, por activa y por pasiva, que no prepara una invasión terrestre de Ucrania, la realidad es que a pocos metros de la frontera ya se agolpan 150.000 soldados rusos.
Además, Rusia ha iniciado unas maniobras en las cuales están presentes todas las armas, desde la fuerza aérea hasta la armada; en el caso de está última las maniobras se están llevando a cabo en comandita con la armada china.
Kiev ha puesto a su ejército en máxima alerta, e inclusive se ha llamado a filas a los reservistas y se están formando unidades militares formadas por civiles a los cuales se le están dando rudimentos de adiestramiento militar.
Fuente – EL PAÍS
Imagen – Mikhail Kamarov / 7th Army Training Command / Cancillería Argentina / Todd Jacobuci / Anatoly / Jordon Pipkin / Cafel