
Con unas tropas rusas en retirada, la próxima acción militar ucrania tendrá como objetivo lograr una cabeza de puente en la orilla oriental del río Dniéper, donde se encontrará con un ejército ruso a la defensiva y parapetado en trincheras y protegido por su artillería
La retirada de las tropas rusas de Jerson abre una enorme incógnita en el desarrollo de la guerra, siendo esta si el ejército ucranio tomará de decisión de cruzar el río Dniéper para continuar la ofensiva.
Es precisamente en la orilla oriental del Dniéper donde los rusos han ubicado la primera línea de sus fortificaciones para evitar que las tropas de Zelenski avancen más.
Tal como aparece en los manuales militares modernos, el cruzar el cauce de un río caudaloso, como es el Dniéper, es toda una aventura militar que hay que asumir, seguramente con gran número de bajas propias.
Bajo el fuego enemigo

La primera asunción que tendrá que hacer el ejército ucranio es que en su ofensiva para cruzar el Dniéper les va a caer de todo, máxime cuando los rusos han fortificado y dotado de abundante artillería la parte oriental del rio.
La última vez que tropas lograron copar las fortificaciones enemigas en la parte oriental del río Dniéper fue en la Segunda Guerra Mundial, y la heroicidad se debió a las tropas soviéticas que coparon las posiciones alemanas.
De hecho, un pequeño grupo de tropas ucranias ya han cruzado el río, y se encuentran en la parte oriental del río Dniéper, dando la batalla por conquistar una cabeza de puente en la localidad de Nova Kajovka.
Se trata de una localidad vital para los rusos, dado que desde esa localidad se controla el suministro de agua dulce para toda Crimea, península que Rusia sumó a su territorio mediante un referéndum no reconocido por la comunidad internacional.
Inclusive si los ucranios pudiesen desplegar sus fuerzas en la zona oriental de río, a partir de ahí les espera una llanura inundada donde es muy difícil mover vehículos pesados, como pueden ser blindados o artillería.
Teoría militar

Sobre la operación militar para superar un río y vérselas contra los blocaos enemigos repletos de tropas y artillería se ha escrito mucho.
De hecho, una operación militar de esas características no se ha producido en ninguna guerra del mundo desde la II Guerra Mundial, y muchos de esos operativos terminaron en rotundos fracasos.
Aunque la mayor parte de la guerra del Vietnam se desarrolló sobre arrozales inundados y también en la guerra de Irak hubo que superar cursos fluviales, nada como lo que se plantea ahora en la guerra de Ucrania.
En la actualidad los rusos han planteado en la orilla oriental del Dniéper una triple fortificación de sus tropas, protegida por abundante artillería de todo tipo, desde la convencional a la de misiles.
La línea de defensa rusa se extiende en 100 kilómetros en línea recta, como ya hemos indicado es tripe y entre línea y línea de defensa hay seis kilómetros de distancia.
En esas líneas de defensa abundan las trincheras, los nidos de ametralladoras y una gran cantidad de blocaos y búnkeres.
La fuerza aérea esencial

En lo que coinciden todos los historiadores militares es en que las grandes batallas con un gran río de por medio y con el enemigo atrincherado en la otra orilla, solo ha arrojado una victoria cuando el atacante tenía superioridad aérea.
Eso es precisamente lo que sucedió cuándo en 1943 los alemanes, ya en retirada, se habían fortificado en la orilla oriental del Dniéper, y los soviéticos, gracias a su superioridad aérea lograron seguir su avance.
También se puede aplicar el mismo principio cuando los aliados lograron cruzar el río Rin en el año 1945 y entraron de lleno en territorio alemán, y donde fue vital para el Ejército Rojo controlar la desembocadura de dicho rio.
En esta guerra la armada y la fuerza área rusas están siendo un convidado de piedra, ya que la defensa antiaérea y antibuques por lo que los cazas y los destructores rusos no están tomando parte en la contienda.
Ante esta situación el hecho diferencial va a darlo la artillería, en donde Rusia tiene ventaja en la convencional, pero los ucranios destacan por artillería de última generación, especialmente todo tipo de misiles.
Ucrania se da un plazo

De cualquiera de las maneras el alto mando militar ucranio no tiene la intención de iniciar una ofensiva a tontas y a locas.
Las fuerzas armadas ucranias están ahora fortificando la orilla occidental del río para tener un lugar seguro donde volver en caso de que la ofensiva fracase.
Además, el ejército ucranio está preparando y pertrechando a conciencia a las unidades militares que participarán en la ofensiva, de manera que nada quede a la improvisación para lograr que la ofensiva sea un éxito.
El ataque sería un éxito si Ucrania tuviese a su disposición artillería – sobre todo misiles – de largo alcance, algo que occidente no ha proporcionado, por el miedo de que con esa artillería se ataque territorio ruso.
Tal como ha informado Rusia, el ataque a su territorio es una «línea roja» que provocaría una guerra total, incluido el uso de armas nucleares, lo que podría provocar una III Guerra Mundial que acabase con el planeta.
Otras opciones

Son las que están sobre la mesa del estado mayor ucranio, como sería iniciar la ofensiva desde la localidad de Zaporiyia, que ya tiene bajo su control.
Esta opción sería mucho más arriesgada, debido a que esta provincia, a diferencia de la de Jarkov, sigue en manos rusas, con lo que habría, previamente, que hacer una «limpieza» lo que alargaría mucho más la ofensiva.
Además, en esa provincia se encuentra la central nuclear de Energodar, la mayor de Europa y que en caso de ser alcanzada por un ataque podría precipitar un accidente nuclear de mucha mayor entidad que el de Chernóbil.
En ese caso el ejército ucranio tendría que llevar a cabo un accidente simultáneo en el sur hacia Jerson y hacia el noroeste hacia Donetsk, lo cual complicaría mucho la operación bélica en ese caso.
Otro peligro es que ninguno de los dos ejércitos, una vez las tropas ucranias hayan cruzado el Dniéper, logre avanzar y la guerra se convierta en una guerra de posiciones, con los dos ejércitos en sus trincheras, frente a frente.
Eso nos retrotraería a la I Guerra Mundial en el frente occidental, con uso masivo de infantería y miles de muertos, con ataques a bayoneta calada para conquistar unos pocos metros de territorio.
Fuente – EL PAÍS
Imagen – 7th Army Training Command / The National Guard / Sputnik / Michaela Pereckas / Geagea / Helen McCarthy